La Cripta ha encontrado su órgano

Gracias a una donación de la Congregación de Religiosas del Sagrado Corazón de Jesús, la Cripta de la Sagrada Familia tiene la oportunidad de disfrutar de un órgano romántico obra de uno de los mejores constructores de la historia, un Cavaillé-Coll de 1896.

Este órgano de referencia y único en Cataluña encaja de manera providencial en una de las capillas de la Cripta y es perfecto para llevar a cabo el acompañamiento musical de la liturgia y para la realización de conciertos.

Desde la parroquia de la Sagrada Familia iniciamos una campaña de mecenazgo para sufragar los trabajos de restauración y traslado del órgano .

Dos obras de arte en armonía

La Cripta

Antes de la Guerra Civil, la Cripta disponía de un órgano de tubos construido en Collbató en 1926. Este órgano, de características muy similares a las del Cavaillé-Coll del Sagrado Corazón, fue destruido al inicio de la guerra .

Desde entonces, la Cripta no ha vuelto a disponer de un órgano de tubos, hecho que desmerece los cantos y la liturgia. Un espacio tan emblemático y con una vida parroquial tan intensa merece un órgano de primer nivel que permita disfrutar de una experiencia musical más profunda en todas las celebraciones.

El órgano

El instrumento donado es un órgano de tubos de estilo romántico construido en 1896 en París por la firma Cavaillé-Coll con motivo de la edificación de la Iglesia del Colegio Sagrado Corazón de la calle Diputación de Barcelona, donde el instrumento ha estado los últimos 125 años.

Aristide Cavaillé-Coll es uno de los organeros más destacados del siglo XIX gracias a su obra revolucionaria, que perfeccionó de forma notable estos instrumentos.

El instrumento comparte con la Cripta la misma estética, la misma época de construcción y el mismo estilo.